miércoles, 20 de febrero de 2013

"Cuando los proyectos de la empresa y de las personas consiguen alinearse, se hacen las cosas de forma más ilusionante y productiva"


Manuel Jiménez Maña
MANUEL JIMÉNEZ MAÑA, Director Gerente de Corporación Jiménez Maña

Manuel Jiménez Maña dirige esta empresa familiar fundada en 1944, líder en la distribución de recambios para automóvil en Andalucía Occidental,  que desde 2006 apuesta por la implantación de la Dirección por Misiones. 

¿Qué lleva a una empresa como Jiménez Maña, con más de 75 años de historia y 300 empleados, a adoptar un nuevo modelo de gestión?

La evolución de la empresa supuso el desarrollo de distintos departamentos. Para aumentar la eficacia y la rentabilidad de los mismos implementamos un modelo de gestión por objetivos. Aunque la productividad aumentó, el que cada departamento llevara “su propia camiseta”, hizo que el ambiente de la empresa se deteriorara y que nuestros clientes y proveedores nos dijeran que nuestra identidad estaba cambiando. Lo que a corto plazo podía haber parecido una buena solución, a medio y largo plazo nos estaba perjudicando. Necesitábamos hacer algo y por eso adoptamos este nuevo sistema de gestión (Dirección por Misiones) donde se considera la empresa como un proyecto único, los departamentos van en el mismo sentido y el nivel de compromiso personal es mucho mayor.

¿Cuáles son las principales dificultades a la hora de conseguir dar el paso hacia el cambio de cultura empresarial?

Si hay que destacar algunas, señalaría tres: primera, que se lo crean los altos directivos, si no, sería imposible su puesta en funcionamiento. En segundo lugar, destacaría tener que vencer los hábitos creados por hacer las cosas de la misma forma durante muchos años.  Y en tercer lugar, y me parece uno de los más importantes, es concretar las ideas y proyectos en cosas medibles y desarrollables. Me explico: en nuestro caso decimos que cada persona de la empresa tiene que comprometerse con los clientes a la entrega en tiempo y forma. Esto significa que todos los departamentos concreten, no sólo el de Logística, cómo tienen que hacerlo. Así, Recursos Humanos tendrá que ver cómo tiene que hacer el área de personal para favorecer este compromiso  y cómo medirlo.

Por su experiencia, ¿cuál cree que es la clave del éxito para conseguir materializar este modelo? 

Todos necesitamos desarrollar los distintos proyectos personales que de forma individual nos hemos impuesto. El modelo de dirección por misiones facilita que los proyectos de la empresa y la persona se alineen y, por lo tanto, se logra hacer las cosas de forma más ilusionante y productiva.

Corporación Jiménez Maña es miembro de la Cátedra de Dirección por Misiones. ¿Qué supone para ustedes ser los principales impulsores de esta Cátedra, y del mismo modo, uno de los anfitriones en la organización del Simposio? 

En estos momentos estamos inmersos en una avalancha de información sobre casos de corrupción. Con el Simposio nuestra ilusión es poder mostrar a la sociedad que hay muchas realidades, muchas empresas que intentan hacer las cosas bien y hacer cosas buenas: su norte es desarrollar a las personas y profesionales que integran sus organizaciones a sabiendas de que esto tendrá como consecuencia -entre otras cosas- la mejora de los resultados económicos.